Solo necesitas un patio que no necesita ser muy grande pero si tiene que recibir bastante luz solar durante el día.
Paso 1: Una vez elegida la parte más soleada de tu jardín. Selecciona la medida que tendrá tu huerta en forma cuadrada o rectangular. Recuerda dejar espacios suficientes para desplazarte alrededor, regar, arar la tierra, etc. Si tienes mascotas tendrás que hacer un esfuerzo adicional y cercar el terreno seleccionado para que nuestros pequeños amigos no puedan entrar a escarbar la tierra, ni hagan sus necesidades en nuestros alimentos.
Paso 2: Tienes que mover la tierra para que se ablande y oxigene, esto tienes que hacerlo con la ayuda de una pala, picota y rastrillo. Tienes que limpiar el lugar para que quede libre de piedras, malezas y pasto. Tiene que quedar solo tierra suelta.
Paso 3: Agrega tierra de hoja y composta a la huerta, la capa tener que ser desde 2 a10 cm de alto, si quieres agregar abono, los alimentos tendrán más nutrientes pero el olor será desagradable y atraerá mosquitos y moscas.
Paso 4: La tierra ya está lista. Ahora solo tienes que sembrar. Lo más fácil son los tomates, perejil, espinaca, berenjenas, pero tu puedes tener lo que quieras.
Paso 5: Recuerda que la semilla no puede estar tan profunda y que es necesario mantener una distancia considerable entre cada semilla para que puedan crecer sin quitarle el agua y los nutrientes a otros cultivos.
Paso 6: Riega tus plantas a diario en la noche o en la tarde para aprovechar más el agua.